Me siento viejo. Qué quieren que les diga: Estoy egresado, mis amigos trabajan, me acuesto temprano los días de semana, ando preocupado de lo que como y mi abuela me pregunta cuándo me caso cada vez que me ve. Todo lo anterior sin perjuicio de que cumplo ¡27! en un par de semanas.
En mi nueva conciencia de pre-treintón he decidido cuidarme. Mi primera medida: Dejar de fumar.
Mi elección no fue arbitraria: El domingo 19 de marzo casi me muero después de fumarme 14 cigarrillos al hilo antes de acostarme. Se me movía el piso y me desperté ahogado varias veces. Ni una gota de alcohol acompañó mi terapia de shock.
Hoy puedo decir (¿con orgullo?) que llevo trece días sin fumar; trece días llenos de smoking-activities entre los que destaca un matrimonio.Mi nueva condición de no fumador ha engrosado mi billetera de universitario, no huelo a nicotina y ando con el pelo y la ropa más limpias. Además duermo mucho mejor.
Sin embargo, a mi edad, estas decisiones no reportan sólo beneficios...
Un ataque de tos que duró una semana fue el primer síntoma que envió mi cuerpo para quejarse de mi nueva política de salud. Las encías se me inflamaron y apareció un poroto en mi paladar que duró dos días. Todo esto con el inevitable y constante flujo de flema debido a la reacción pulmonar. Además, se me generó un desequilibrio digestivo que me hace ir al baño a deshoras, y el hambre es mi nueva y tortuosa compañera.
¿Algo más? Pues sí. Así como el cigarro produce "dificultades" sexuales debido a que el flujo sanguíneo no llega con fuerza a las extremidades, dejar de fumar causa el efecto contrario. Así, mis ultra-secas manos desaparecieron y ahora no sé qué hacer para que dejen de transpirar; sin perjuicio del repentino despertar del quinceañero Máximo a todas horas del día.
En fin. La conclusión de todo esto es que mientras más viejo uno se pone, más traumáticos son los cambios que uno intenta llevar a cabo; por eso me parece que esto de dejar de fumar y volver a hacerlo es muy mala idea a mi edad.
Creo que nunca más volveré a fumar.
¿Alguien quiere los 6 cigarros que no pude fumarme en mi terapia de shock? Yo no los voy a querer.


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